- La Conferencia Local de Juventud sobre el Cambio Climático reunió a 90 chicos y chicas para contribuir a la agenda de acción climática con propuestas para la COP28 que se celebrará en Dubái
- Han abordado temas como la transición ecológica justa, la mitigación de emisiones o las pérdidas y daños del cambio climático
Desde que en 1992 nacieran las cumbres del clima para tomar medidas en contra del cambio climático, cada vez más actores se han ido involucrando en estos importantes espacios. Entre ellos, los niños, niñas y adolescentes.
Los más jóvenes han querido ser parte de la agenda global de acción climática. Primero, participando en las diferentes Cumbres del Clima; después, a través de la creación de varios encuentros dirigidos exclusivamente a ellos:
- La COY (Conference of Youth) a nivel internacional, que reúne a jóvenes de todo el mundo a través de YOUNGO, la red oficial de jóvenes circunscrita a la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.
- La LCOY (Local Conference of the Youth) a nivel local: conferencias de juventud cuyo fin es capacitar a los y las jóvenes a nivel local y elaborar un informe de demandas políticas de la juventud dirigido a los representantes políticos.
Qué es la LCOY
En España, la LCOY actúa como un puente entre la juventud comprometida y las autoridades responsables de la toma de decisiones. La más reciente, celebrada del 3 al 5 de noviembre en Guadarrama (Madrid), ha tenido como objetivo elaborar un informe de propuestas que la sociedad civil joven llevará a la COP28 (la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, que se celebrará del 30 de noviembre al 12 de diciembre en Dubái).
Celebrada en Guadarrama (Madrid), la LCOY ha tenido como objetivo elaborar un informe de propuestas que la sociedad civil joven llevará a la COP28
Durante el encuentro, en el que participaron 90 jóvenes, se abordaron temas vinculados a la agenda global de acción, la próxima COP28 y las prioridades españolas (como la mitigación de emisiones, las pérdidas y daños causados por el cambio climático o la importancia de proteger nuestros océanos).
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Lucía, una de las participantes de la LCOY y que irá a la COP28 este año con UNICEF España, ya que forma parte del grupo asesor de infancia y adolescencia, cuenta cómo ha sido el encuentro.
“Nada más llegar dispusieron un espacio en el que hicieron una introducción de lo que era la LCOY y hablaron representantes de distintas organizaciones que habían colaborado para que este evento se pueda llevar a cabo”, dice.En la inauguración participó la secretaria de Estado para la Agenda 2030, Lilith Verstrynge.
Una vez en grupos, hicieron una actividad consistente en asociar conceptos, causas y consecuencias. Al día siguiente, asistió a varias ponencias sobre la ONU y el funcionamiento de las Cumbres del Clima, y sobre temas como adaptación y mitigación al cambio climático orientados a combatir la crisis climática. A Lucía le sirvió para aprender algunos conceptos nuevos.
Imágenes del encuentro tomadas por Lucía, una de las chicas participantes
El proceso formativo continuó para los chicos y chicas participantes a través de grupos de trabajo transversales en torno a diferentes temáticas. En el caso de Lucía fue el grupo de ecofeminismo y biodiversidad, en el que elaboraron en primer lugar un marco de la situación actual para a partir de él elaborar propuestas. Posteriormente, a través de talleres, “hicimos grupos de puesta en común de distintas líneas temáticas de cooperación y propuestas desde cuatro enfoques: mitigación, adaptación, pérdidas y daños y transición justa. Han salido propuestas muy interesantes”, cuenta.
Este trabajo concluyó con una “hora y media de puesta en común de cara a la COP, que era el objetivo”. Finalmente, asistió a talleres sobre temas como transición justa, mitigación sobre cambio climático y otras temáticas propuestas por las diferentes asociaciones que venían, como el movimiento juvenil internacional Fridays for Future.
Aportaciones de la juventud a la COP28
La LCOY en España muestra que la juventud es capaz de liderar el camino hacia la transición justa y un futuro más resiliente, a través de la mirada de chicos y chicas que tienen muchas ideas que aportar. El encuentro busca crear un grupo representativo de la juventud para asegurar que las voces de los jóvenes sean escuchadas en las negociaciones climáticas.
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Para ello han elaborado un informe de propuestas de la sociedad civil joven, que recoge sus recomendaciones y será presentada ante los políticos y actores clave presentes en la COP28 para exigir justicia climática y transformar nuestras contundentes que cumplan con el Acuerdo de París establecido en 2015.
Algunos de los temas y propuestas:
Gobernanza climática. Incluyen propuestas como garantizar el acceso a la información. Por ejemplo, a través de asambleas ciudadanas, incluyendo informadores jóvenes en los barrios y las ciudades “para capacitar y facilitar la participación ciudadana multinivel”. Hablan del derecho al litigio climático y del régimen de incompatibilidades: no pueden ser las personas con vínculos con los combustibles fósiles quienes dirijan las políticas climáticas.
Mitigación. Quieren abordar el modelo energético al que se debe transicionar, ya que consideran que el modelo actual es insostenible. Apuestan por acciones más ambiciosas que las que se están tomando en la actualidad, incluyendo eliminar los combustibles fósiles, apostar por la soberanía energética, avanzar hacia un modelo de industria más local y una economía circular en el sector tecnológico, y que España se adhiera al Tratado de NO proliferación de combustibles fósiles, entre otras cosas.
Adaptación. Entre las ideas está “optimizar recursos que ya tenemos para adaptarnos a la crisis que ya tenemos” y “no solo paliar, también aprovechar”.
Migración y desplazamiento. Han abordado la diferencia entre migrantes y refugiados climáticos: “Se institucionaliza o crea vías seguras de migración para evitar violencias de género y sexuales”.
Transición justa. Consideran que la transición justa permite abordar los aspectos socioeconómicos, del mundo del trabajo, y de muchas otras dimensiones de la acción climática para que nadie quede atrás. “Una transición justa puede potenciar efectos transformadores: debe aumentar la resiliencia comunitaria, debe ir dirigida a atacar las desigualdades y sistemas de opresión existentes, agravadas por el cambio climático, y que la acción climática no genere nuevas desigualdades”, proponen. “Una transición justa tiene como limitación el marco de la economía capitalista basada en la explotación de la naturaleza y de los seres humanos”. Sugieren incluir en la COP28 un programa específico de trabajo sobre Transición Justa.
Otros temas que han abordado: Pobreza energética, pérdidas y daños, ecosistemas y subida del nivel del mar, agua y sistema alimentario, salud y bienestar, ciudades, asentamientos e infraestructuras.
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