- El proyecto Nuevas Perspectivas sobre la Infancia de la OCDE busca comprender la naturaleza cambiante de la infancia y cómo empoderar a los jóvenes para afrontar los cambios globales
- Las expertas abordan en un webinar cómo los sistemas educativos pueden apoyar la participación infantil y cómo incluir a los niños y niñas que encuentran barreras para la participación
Frente a los vertiginosos cambios que experimenta el mundo (como aquellos vinculados a la digitalización, la globalización o el cambio climático), la infancia y la adolescencia están en el centro. Los jóvenes son los más afectados, pero también artífices del cambio necesario.
Por eso, empoderar a los niños y niñas para que formen parte de su sociedad no solo es garantizar sus derechos; también es la mejor forma de construir unas sociedades más inclusivas, justas y eficaces. El reto: hacerlo de forma que ninguno quede fuera.
Empoderar a los niños y niñas para que participen no solo es garantizar sus derechos: es la mejor forma de construir unas sociedades más inclusivas, justas y eficaces
¿Cómo garantizamos que se escuchen las voces de todos los niños y niñas? El proyecto Nuevas Perspectivas sobre la Infancia de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) busca comprender mejor la naturaleza cambiante de la infancia y cómo la educación puede empoderarla para afrontar los cambios globales y actuar en cuestiones que les son importantes y relevantes.
La infancia regresa al Congreso para pedir políticas públicas que la tengan en cuenta
Su reciente informe What Does Child Empowerment Mean Today?, que recoge ejemplos de cómo los niños y niñas pueden participar en la toma de decisiones, inicia con un análisis: cómo ha cambiado el concepto de la infancia y su papel en las sociedades. Con el avance del diálogo en torno a los derechos de los niños y niñas, estos han pasado a verse como agentes, sujetos de derechos y, finalmente, como actores en los procesos de toma de decisiones.
La participación infantil aporta perspectivas únicas, permite una mejor formulación de políticas y democracias más fuertes
El informe también incide en que la participación infantil permite una mejor formulación de políticas y democracias más fuertes, y que el empoderamiento infantil aporta perspectivas únicas y agrega valor a las de los adultos. Recoge la opinión de Bo Stjerne Thomsen, vicepresidente de la Fundación Lego, que destaca que los niños son inherentemente creativos, curiosos e imaginativos, y que pueden ser modelos a seguir a la hora de pensar en formas en que la educación puede ser más significativa, atractiva y agradable.
Según el informe, cuando los niños y niñas se sienten empoderados, es más probable que:
- Expresen sus opiniones
- Aboguen por el cambio
- Emprendan acciones significativas en sus escuelas y comunidades
Empoderar a los jóvenes para que cambien sus sociedades
La escocesa Ellie Craig es portavoz del Scottish Youth Parliament, que cuentan con 160 miembros, un espacio “totalmente dirigido por jóvenes, lo que significa que ellos y ellas toman todas las decisiones importantes sobre su labor”, cuenta en el seminario How does including children transform research and policy making? celebrado el pasado 29 de julio en el marco de la campaña de la OCDE.
Desde este órgano juvenil, los chicos y chicas deciden qué temas abordar, las campañas y la planificación y dirección de consultas e investigaciones para conocer “no solo la opinión de los jóvenes, sino también cómo desean participar en los procesos de toma de decisiones”.
Este parlamento joven ha influido en políticas públicas de su país atendiendo a las necesidades de la infancia y adolescencia. Un ejemplo es el programa de viajes gratuitos de autobús para menores de 22 años, que nació de una consulta a población joven por parte de los miembros del parlamento para conocer su experiencia en el transporte público. De esa consulta, elaboraron una serie de propuestas y las compartieron con el gobierno escocés, y desde enero de 2022 se han realizado casi 219 millones de viajes a través de este programa. Ahora, los chicos y chicas de este parlamento trabajan en una ley para la seguridad online de los más jóvenes.
La participación infantil en la investigación
“La esencia de involucrar a los niños y niñas en la investigación es hacer visible lo invisible. Y debemos hacerlo de una manera que sea auténtica con sus voces y experiencias”, dice en el seminario Dympna Devine, profesora de Educación, Sociedad y Estudios Críticos de la Infancia de UCD School of Education (Dublín). La investigadora ha abordado cómo los sistemas educativos pueden apoyar la participación infantil, compartiendo algunos ejemplos concretos de investigaciones que han involucrado directamente las opiniones de la infancia.
“La esencia de involucrar a los niños y niñas en la investigación es hacer visible lo invisible”
Una de ellas fue un exhaustivo análisis de cinco años sobre la vida escolar de los niños y niñas en Irlanda, que involucró a 4.000 escolares de 184 colegios para conocer cómo era su transición por el sistema educativo.
Pero también ha llevado a cabo investigaciones más pequeñas, como la que realizó su equipo en una zona rural de Sierra Leona durante cinco años, para evaluar la seguridad del aprendizaje, alfabetización, bienestar e igualdad de género, monitoreando a 3.000 niños y niñas y sus familias. En esta investigación “se trabajó más intensamente con niños y sus familias dentro de la comunidad. Esto fue fundamental para captar la voz de la infancia en su experiencia cotidiana”, destaca Devine.
Garantizar la inclusión de todos y todas
Uno de los mayores retos para que esta participación sea real es cómo garantizamos una representación amplia de todos los niños y niñas, incluyendo a aquellos de entornos desfavorecidos o con necesidades especiales, por ejemplo.
“Existe un desafío con los niños o comunidades de difícil acceso”, reconoce Devine. Ella lo ha comprobado en investigaciones como la de Sierra Leona, “ya que se ubica en zonas rurales, donde a menudo el acceso es difícil. Sin embargo, existen métodos para garantizar que todos los niños y niñas tengan la oportunidad de expresar sus inquietudes, ya que puede haber mucha dinámica de grupo entre ellos”. En su caso, “los estudios en los que he participado han sido representativos; ha sido fundamental contar con una muestra de niños que represente la diversidad infantil”.
Uno de los métodos es trabajar con organizaciones que representan a niños, niñas y adolescentes que encuentran barreras para participar
Craig reconoce también que los espacios de toma de decisiones suelen estar integrados por aquellos jóvenes de entornos más privilegiados. “Sin embargo, hemos trabajado mucho durante los últimos 25 años para asegurarnos de llegar a jóvenes de todos los ámbitos en toda Escocia”, dice.
Uno de los métodos que han llevado a cabo para lograrlo es trabajar con organizaciones que representan a niños, niñas y adolescentes que encuentran barreras para la participación. “Tenemos miembros que representan a jóvenes que podrían tener dificultades para participar. En las comunidades y distritos locales, para tener acceso a estos jóvenes, apoyan a aquellos que podrían no estar en educación formal. Debe darse un enfoque de red: ir donde están los niños y las personas, sin esperar que vengan a ti”.
“Es importante practicar la participación de forma significativa. Los niños, niñas y adolescentes tienen que ser capaces de tomar parte del proceso y entenderlo”
La joven también reflexionan sobre cómo evitar el tokenismo, o la práctica de incluir a la infancia de forma superficial para dar apariencia de inclusión. “Por desgracia, a veces la gente tiende a usar las opiniones de los jóvenes como arma política. Hay mucho trabajo por hacer. Lo más importante es la educación”, dice. “Es importante practicar la participación de forma significativa. Los niños, niñas y adolescentes tienen que ser capaces de tomar parte del proceso y entenderlo”.