Rim (segunda por la izquierda) durante su presentación en el Congreso de los Diputados. @UNICEF España. Plataforma de Infancia/2025/Hugo Palotto
- Rim, del grupo asesor de UNICEF España, pide en el Congreso de los Diputados que se respeten los derechos de los jóvenes migrantes y refugiados
- “Los niños y niñas que hoy reciben ayuda, apoyo y protección serán mañana los ciudadanos que nos ayuden a construir el progreso. Invertir en ellos es invertir en un futuro mejor”
- En el Día Mundial del Refugiado, el 20 de junio, nos unimos a la petición de que se garanticen los derechos de la infancia desplazada en cualquier situación
Rim llegó a Mollerussa (Lleida) hace seis años, cuando tenía once. Hoy, con 17, es una joven comprometida con los derechos de la infancia. Forma parte del Consejo de Infancia de su localidad, del consejo de Catalunya, del Consejo estatal de participación y del Grupo Asesor de UNICEF España. Sin embargo, sabe que no todos los niños y niñas tienen la suerte de poder ejercer su derecho a la participación, como ella, y que algunos apenas tienen sus derechos más básicos garantizados.
El pasado 2 de junio asistió con otros siete chicos y chicas a la Séptima Jornada Parlamentaria de la Comisión de Juventud e Infancia del Congreso de los Diputados, en Madrid, para hablar de infancia migrante y, entre ella, los niños, niñas y adolescentes refugiados o desplazados.
La infancia regresa al Congreso para pedir políticas públicas que la tengan en cuenta
Allí hizo una emotiva presentación para reivindicar que todos los niños y niñas tienen los mismos derechos, sin importar el origen, el estatus o la situación.
“No vengo a daros datos, vengo a compartir realidades que tienen nombre y rostro”, dice durante su presentación. “Hablo de la infancia migrante, de quienes cruzan mares y fronteras no para buscar una vida mejor sino simplemente una vida”.
Ella comparte su propia historia migratoria, marcada por la fortuna de haber contado con “una profesora que me ha acompañado mientras aprendía y compañeros de clase realmente admirables”. Pero cree que no todos los chicos y chicas tienen su suerte.
Los ocho chicos y chicas que participaron en la jornada de Infancia en el Congreso. @UNICEF España. Plataforma de Infancia/2025/Hugo Palotto
Niños y niñas refugiados en cifras
La infancia es una de las principales víctimas del drama del desplazamiento forzoso. Niños y niñas equivalen al 29% de la población mundial, pero representan el 40% de todas las personas desplazadas por la fuerza, según advierte ACNUR. Desde la crisis de refugiados de 2016, la cifra de personas refugiadas se ha disparado en la última década: a finales de 2024, era de 123,2 millones.
Según datos de UNICEF, en el mundo, 28 millones de niños y niñas han sido víctimas de desplazamientos forzosos por motivos como conflictos o violencia, dentro de los casi 50 millones de niños y niñas migrantes que hay en el mundo. 43 millones han dejado sus casas por culpa del cambio climático. Muchos de ellos encuentran pocas vías seguras para migrar, reunirse con las familias o pedir asilo, y una vez que llegan a su nuevo país, la garantía de sus derechos corre peligro.
Además de la experiencia de un viaje que puede resultar traumático, una vez que llegan al lugar de acogida, estos niños, niñas y adolescentes tienen un riesgo mayor de sufrir discriminación, algo que puede dejar secuelas persistentes en su bienestar y salud mental.
Qué hacemos para evitar los sesgos de discriminación en la infancia
¿Cuál es la situación en España? Como menciona Rim, cientos de niños y niñas viven en asentamientos sin agua ni luz; hay más de 11.000 niños y niñas que llegaron al país solos, incluyendo los miles de chicos y chicas que llegan a Canarias y a quienes, a pesar de ser menores de 18 años, se dificulta sistemáticamente el acceso a la residencia. En 2021 se estimó que 150.000 niños y niñas están en situación irregular.
“¿Qué amenaza representa un niño de 12 años que solo quiere ir a la escuela y jugar en paz?”
“No es un problema de números, es un problema de humanidad”, dice Rim. “Hay quien dice que no se puede acoger a todo el mundo. ¿Desde cuándo se miden los derechos de un niño o niña según su país de nacimiento? He escuchado también discursos que hablan de seguridad o de amenaza. ¿Qué amenaza representa un niño de 12 años que solo quiere ir a la escuela y jugar en paz?”
El deber de acoger
La reivindicación de Rim coincide con lo que dicen los tratados internacionales: los derechos de la infancia no deben depender del lugar de nacimiento ni del estatus migratorio. Según la Convención sobre los Derechos del Niño, los Estados deben garantizar protección y asistencia especial a los niños refugiados o que buscan asilo (artículo 22), algo que debe aplicarse a todos los niveles de la administración pública. Los municipios, por tanto, tienen deberes sobre aspectos como la protección, alojamiento, escolarización o acceso a servicios de estos niños y niñas.
“Cuando decimos que protegemos a la infancia debemos hablar de toda la infancia, no solo la que tiene papeles o la que nace aquí”
“Cuando decimos que protegemos a la infancia debemos hablar de toda la infancia, no solo la que tiene papeles o la que nace aquí”, recalca, y comparte algunas propuestas elaboradas con el Grupo Asesor de UNICEF España:
- Que todo niño o niña que llega a las fronteras sea acogido con dignidad, identificado correctamente y acompañado psicológicamente desde el primer momento.
- Que, si el sistema se satura, se garantice el traslado de esos niños a otras comunidades en tres meses, “porque el tiempo cuando eres niño duele mucho más”, dice.
- Considera que todos los niños y niñas deben tener acceso a la educación y la participación, y pide que se luche desde las instituciones, especificando que la discriminación no nace en los barrios sino allí dentro, en el propio Congreso.
- También reclamó atención a la salud mental, un aspecto muchas veces olvidado, pero crucial para los niños y niñas que atraviesan situaciones tan adversas: “Huir de la guerra, del hambre o del rechazo deja heridas que no se ven pero pesan muchísimo”.
‘NTP: Coméntalo’, normalicemos el diálogo de la salud mental
Naciones Unidas, a través del Comité de los Derechos del Niño y del Comité para la Protección de los Trabajadores Migrantes, está trabajando en la creación de una nueva Observación General sobre los niños y las migraciones. Servirá de guía para gobiernos, políticos, jueces y fiscales, abogados, policías, médicos, profesores, empresas, medios de comunicación y toda la sociedad en su conjunto.
Durante esta jornada, los ocho chicos y chicas, miembros del Grupo Asesor de UNICEF España, abordaron temas como la violencia o la educación y terminaron pidiendo un minuto de silencio por los niños y niñas refugiados, víctimas de guerra, genocidio o desplazados por el cambio climático.
“Esto no va de ideologías, sino de derechos, de dignidad, de humanidad”, concluye Rim. “Los niños y niñas que hoy reciben ayuda, apoyo y protección serán mañana los ciudadanos que nos ayuden a construir el progreso de nuestra sociedad. Invertir en ellos es invertir en un futuro mejor para todos. Cuidarlos hoy es sembrar la esperanza de un futuro más justo y con posibilidades para todos”.
