- Un centenar de chicos y chicas se reúne en la tercera conferencia de juventud local en León para formarse y debatir sobre cómo hacer frente al cambio climático.
- Charlamos con Amnah, Bea, Lara y Uxia, cuatro chicas de la Comisión de Acción Climática del grupo asesor de UNICEF España, para conocer cómo fue este encuentro
La ciudadanía más joven está consiguiendo un logro importante: hacerse un hueco en la toma de decisiones en torno a la crisis climática que ellos, más que nadie, van a vivir. Quienes hoy son niños, niñas y adolescentes, así como a las generaciones futuras, tienen mucho que decir y deben estar presentes en las cumbres por el clima y otros espacios de negociaciones.
Por eso, antes de cada Cumbre sobre el cambio climático (COP) se organiza una Conferencia Global de Juventud (COY), cuyo fin es recoger las demandas políticas de los jóvenes en materia de acción climática. Pero previamente tienen lugar las conferencias de juventud locales, celebradas en diferentes ciudades con el nombre de LCOY (Local Conference of the Youth), con un objetivo: formar a los jóvenes participantes y elaborar un informe de sus demandas dirigido a los representantes políticos.
Las conferencias de juventud locales (LCOY) tienen como fin formar a los jóvenes participantes y elaborar un informe de sus demandas dirigido a los representantes políticos
Los días 13, 14 y 15 de septiembre se celebró la tercera edición de LCOY en Villamanín (León). Este evento reunió a un centenar de chicos y chicas para formarse y debatir sobre cómo hacer frente al cambio climático. Organizado por el Consejo de Juventud de España, detrás del encuentro está el patrocinio de organizaciones de la economía social y solidaria y movimientos sociales, como Ecooo. Las conclusiones se llevarán a la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2024 (COP29), que se celebrará en Bakú, Azerbaiyán.
El encuentro de LCOY contado en primera persona
El pueblo de Villamanín fue el escenario donde se encontraron chicos y chicas de orígenes muy distintos y de diferentes entidades (Fridays for Future, Equipo Europa o el organizador Consejo de Juventud).
“Hay personas que vienen en representación de asociaciones, colectivos relacionados con el medioambiente”, cuenta Uxia, de 15 años. Ella asistió como miembro de la Comisión de Acción Climática de UNICEF España, pero también hay personas que van sin una organización, “es algo abierto”.
En la primera fase del encuentro, tanto ella como el resto de jóvenes recibieron formaciones de temas relacionados con el cambio climático, de mano de expertos en las diferentes materias. Temas como biodiversidad y océanos, ciencias climáticas, extraccionismo o renovables, entre otros. “Yo asistí a cinco formaciones: convenios de transición justa, sindicalismo y transición justa, nuevo objetivo cuantificable, océanos y ecofeminismo”, dice Uxia.
Bea también cuenta cómo fueron las formaciones: “Aparte de aprender del ponente, aprendemos mucho de las aportaciones de las compañeras, generando un clima de aprendizaje muy enriquecedor. A mí personalmente me encantaron todas, si tengo que elegir una sería la de ciencia climática y qué papel debe ocupar esta en la toma de decisiones”.
Estamos comenzando la @lcoy_spain aprendiendo sobre transición justa 🌳⚖️ pic.twitter.com/HznB8dVuMq
— Juventud Por El Clima – Fridays For Future España. (@JuventudXClima) September 13, 2024
Propuestas de la adolescencia
Después de las formaciones, los chicos y chicas se dividen en grupos de trabajo para abordar distintas temáticas y extraer ideas que se llevarán a la COP. “En cada grupo, nos dedicábamos a hacer propuestas y ver cómo podíamos llevar todo esto a la práctica más allá de la LCOY y que no se quedara allí”, cuenta Amnah.
Ella formó parte del grupo de trabajo sobre empoderamiento juvenil, al igual que su compañera Lara, que cuenta: “Trabajamos en base a la idea de que la gente joven se pudiese implicar más, que llegase mejor la información a la gente joven, también implicar a menores de edad. Tratamos de crear mecanismos nuevos mediante los cuales si la gente joven quiere aportar tenga la manera de hacerlo y tenga una repercusión. Que no llegasen a la gente joven solo de los colegios o las universidades sino también a las personas que viven en situación de vulnerabilidad”.
Bea participó en el grupo de salud y adaptación. “Constatamos que el punto que nos parece más importante para combatir el cambio climático es el urbanismo, fue el tema del que más aportaciones y propuestas hicimos”.
Por su parte, Uxía formó parte del grupo de océanos y biodiversidad, en el que analizaron las problemáticas que hay a nivel español, propusieron medidas, qué herramientas iban a utilizar y a qué instituciones iban a pedir cada cosa. Entre sus propuestas, explica, está un mayor control de los vertidos, un aumento de los controles en las aguas españolas, una red entre grupos medioambientales de España o facilitar que los jóvenes puedan aportar propuestas sobre biodiversidad: ideas que llevarán a cumbres como la COP29 o la COP16 de la biodiversidad en Colombia. También, que se apueste más por los jóvenes científicos: “Algunos biotecnólogos y biólogos que había en mi grupo hablaban de que no tenían los fondos suficientes para llevar a cabo investigaciones sobre ciertas problemáticas en sus localidades para ayudar a preservar la biodiversidad”, recuerda.
Un espacio diverso de encuentro
Las cuatro participantes coinciden en que uno de los puntos fuertes de este encuentro es la diversidad de los participantes y sus puntos de vista y experiencias. “Allí convivimos personas con ideas, edades y estudios muy diferentes, nacionalidades y organizaciones variadas. En vez de suponer un problema, fue más interesante y enriquecedor, pudimos aprender de otras opiniones y experiencias”, dice Bea.
Uxía destaca “la sensación de comunidad y la cantidad de enlaces que hemos hecho. Hemos conocido a personas diversas, es un espacio seguro”.
“Es muy interesante cómo cada uno desde su perspectiva y su trayectoria puede aportar a la acción climática”, dice Amnah. “En mi caso, soy una estudiante de bachillerato, y mi experiencia es estar interesada en participar y dar mi opinión como persona que está viviendo las consecuencias del cambio climático, pero también había personas haciendo másters en economía circular, personas estudiando relaciones internacionales, o voluntarios de asociaciones”, cuenta. “Personas de distintos ámbitos unidas por la preocupación por el cambio climático. Eso es importante porque es la representación de toda la juventud de España para poder acatar el tema de cambio climático. Creo que es un espacio muy importante porque es donde estamos representados todos y todas, una apuesta en común de toda la juventud de España para poder llegar a una solución en cuanto a la crisis climática”.
Ha sido un placer conversar, debatir y reflexionar, con los y las activistas climáticas jóvenes que participan durante este fin de semana en la Conferencia Juvenil sobre el Cambio Climático de la ONU. pic.twitter.com/Bcbl4j6lv8
— Sira Rego 🔻 (@sirarego) September 14, 2024
Lara coincide en “la manera en que todos estábamos unidos hacia la misma causa. Te da una sensación de apoyo, de que tienes una red de gente que está luchando por crear un mundo más justo”, dice. “Lo que hablamos en el evento no se va a quedar ahí, sino que queremos seguir trabajando en ello”.
Durante el evento los participantes han reivindicado un mayor acceso al transporte público, a una vivienda asequible y al empleo de calidad por parte de la juventud rural. También denuncian la criminalización a la que se está viendo sometida la lucha ecosocial, con casos como infiltraciones policiales en movimientos sociales, algo que según creen recorta el derecho a la protesta. “No estamos haciendo ningún ataque violento sino luchando por un mundo más justo y sostenible para todo el mundo”, dice Lara.
El evento ha concluido con una concentración en la plaza de la Catedral de León, para hacer visibles estas reivindicaciones.
Propuestas más ambiciosas para las COP
En cuanto a las Cumbres por el Clima, que llevan celebrándose desde 1992, creen que ha habido ciertos progresos. “Creo que el avance que se está consiguiendo desde las últimas COP es que se le está dando más voz y voto a la juventud”, opina Amnah. “Hay grupos de juventud formando parte de las negociaciones, tenemos dos personas en la LCOY que forman parte de generación clima”.
“A nivel personal me enorgullece poder decir que los jóvenes estamos aportando a la COP, que estamos siendo escuchados y tenemos esa audiencia y ese espacio de participación”, coincide Uxia.
Sin embargo, quieren ver más cambios. “Queremos conseguir algo más ambicioso de lo que se acordó finalmente en la COP, quizá se quedó un poco corta, sobre todo en el tema de combustibles fósiles y justicia climática con ciertos países”, reconoce Lara. “Creo que el trabajo de la LCOY era intentar conseguir por parte de la juventud unas propuestas muy ambiciosas y que se pudiese avanzar los máximo posible”.
Por eso, en la COP29 llevarán un documento que ella considera “muy ambicioso. Evidentemente no sé pronosticar qué va a pasar, no sabemos los intereses que habrá, pero sí sé que ese documento lo presentaremos, se llevará a las negociaciones y habrá compañeros que lo defenderán para que se pueda avanzar lo máximo posible”.
“Para mí fue muy importante sentir que desde un pequeño pueblo de montaña y tras un fin de semana increíble nuestras opiniones y aportaciones van a llegar a la mayor conferencia de clima del mundo”, dice Bea, para quien el cambio climático es “un problema que solo resolveremos cuando todos aportemos nuestro granito de arena”.