En la última sesión del Parlamento Online de UNICEF, celebrada el pasado 24 de noviembre bajo el título ‘Ideas para la Cumbre de París’, 51 niños y niñas de entre 10 y 14 años, de varias de nuestras ‘Ciudades Amigas de la Infancia’, debatieron uno de los retos para la humanidad de hoy y en el muy cercano futuro: el cambio climático. Todos ellos pusieron de manifiesto su preocupación por los efectos que sobre su vida puede causar el cambio climático y los fenómenos a él asociados, en sus propias palabras:
“al fin y al cabo el dinero, en algún momento, no podrá pagar el daño que se ha hecho en la tierra”.
Dentro de las propuestas que hicieron podemos encontrar:
- usar más el transporte público, la bicicleta y otros medios menos contaminantes para desplazarse, incluidos los desplazamientos a pie,
- mejorar el reciclaje,
- controlar la contaminación ambiental;
- usar energías renovables, y
- generar conciencia social mediante campañas adecuadas.
A los líderes mundiales reunidos estos días en París con ocasión de la Cumbre sobre el Cambio Climático (COP21) les piden, entre otras cosas, la creación de más parques y zonas verdes, una mayor protección de la naturaleza y de los animales y que escuchen la voz de los propios niños y niñas, porque con sus opiniones, el mundo será mejor.
La proyección del siguiente vídeo, durante la COY11, ha llevado todas estas declaraciones a París. La COY 11 , es la conferencia de jóvenes sobre medio ambiente, que tiene lugar previamente a las Conferencias sobre el Clima -COP- organizadas por las Naciones Unidas:
En el resumen de la sesión, se puede encontrar adicionalmente, el trabajo que Julián, de 13 años y miembro de la ‘Comisión contra el Cambio Climático’ del Ayuntamiento de Alcobendas, hizo sobre el tema, y que tituló: ‘Acabar con el calentamiento global. Minimizando consecuencias económicas’.
A no ser que actuemos ya, el impacto del cambio climático en los niños
En UNICEF estamos muy preocupados por el impacto que el cambio climático puede tener sobre los niños de hoy y de mañana. Por ello, hemos lanzado el informe A no ser que actuemos ya, en el que señalamos la importancia de tomar decisiones de cara a la Cumbre de Cambio Climático de París (COP21).
En esta cita se reúnen representantes de 195 países, más la Unión Europea, con el fin de alcanzar un pacto global de lucha contra el cambio climático. Se trata de una cita crucial para nuestro planeta.
El cambio climático cada vez afecta a más personas en el mundo, pero si hay un colectivo que cada vez va a sufrir más las consecuencias del calentamiento global son los niños y las niñas, especialmente los que viven en condiciones de pobreza extrema. Los cambios en el clima intensificarán las sequías, las inundaciones y las olas de calor que, a su vez, incrementan la propagación de los peores enemigos de la supervivencia infantil como la desnutrición, la malaria o la diarrea.
Más de 500 millones de niños y niñas viven en lugares muy propensos a sufrir inundaciones y alrededor de 160 millones viven en países donde las sequías son cada vez más habituales. La gran mayoría de los niños que viven en zonas con un alto riesgo de inundaciones se encuentran en Asia, y la mayoría de los que se encuentran en zonas con riesgo de sequía, en África. En estos lugares poco desarrollados, los niños y niñas sufren más los efectos de los desastres causados por el cambio climático y tardan más en recuperarse.
Los líderes mundiales tienen ahora la oportunidad de frenar el cambio climático y sus consecuencias sobre el planeta. La Cumbre de París es el momento de llegar a un acuerdo para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, principal causa del problema, y para promover energías limpias y sostenibles.
El calentamiento global agrava también los efectos de ciertos fenómenos meteorológicos que se producen periódicamente, como ‘El Niño’, que este año se espera que sea devastador.